Coral y Fran están a solas, Raúl llega de improviso y termina con todo

Coral ayuda a Fran a encontrar a su hija, ella también fue abandonada por su padre, pero a diferencia de Fran, nunca la buscó.

Coral encuentra pistas importantes sobre la investigación de Fran. En Amar es para siempre.

Fran está en un callejón sin salida, Candela no quiere saber nada de él. La confesión conmocionó a Coral, que no tenía ni idea de cuál era el verdadero motivo de su regreso a Madrid. Fran confía en Coral al contarle su mejor secreto: «No se lo he contado a nadie todavía«.

La joven se esfuerza por ayudar a Fran, hasta el punto de que finge un dolor de cabeza para suspender una cena con Raúl. Coral se planta en casa de Fran para contarle algo que ha descubierto.

Fran le enseñó a Coral una foto que tomó el detective que contrató y donde se ve a Candela. Coral se reunió con su amiga Paloma y en la charla con ella, descubrió el sitio donde se tomó la fotos en la que aparece Candela.

Fran se extraña de la desinteresada ayuda que recibe de Coral: «Creo que hay algo personal en la ayuda que me ofreces«, le dice el joven.

Coral confiesa la razón por la que decidió ayudarlo: «Mi padre bajo un día a la calle y ya no volvió. Nunca intentó buscarme como estás haciendo tu con tú hija«.

Fran se queda impactado con la revelación de Coral. Ella sufrió lo mismo que la hija que Fran trata de encontrar. Coral, mirándolo a los ojos, le aseguró a: «Te prometo que averiguaré todo lo que pueda«.

El timbre de la puerta rompe la magia que existía entre Coral y Fran. Raúl está al otro lado, Coral no sabe que hacer.

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Fuente: antena3.com