Julieta y Raul siguen con su apasionado romance sin importarles nada ni nadie. En Amar es para siempre.
Gracias a Julieta , Raúl, ha recuperado las ganas de vivir. El joven se alejó de todo lo que le recordaba a Coral y se instaló en un hotel rural.
«No se me ha perdido nada en Madrid», le dijo a su madre cuando le preguntó cuando volvía a casa. El joven le comentó que, por ahora, no tenía planes de regresar.
Julieta y Raúl parecen haber perdido el miedo a ser vistos. La camarera, en horario de trabajo, sigue junto a Raúl como si nada. La encargada del hotel la ha visto y cree que su actitud no es la más acertada mientras está trabajando.
A Julieta y Raúl ya no hay quien los pare. Los dos está decididos a vivir su amor sin ningún tipo de trabas.
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Fuente: antena3.com