Este Miércoles en ‘Amar es para siempre‘: Manolita y Marcelino siguen de bronca a cuenta del problemón que se les echa encima. Maite no asume el color de su verdadero padre.
Manolita y Marcelino siguen de bronca a cuenta del problemón que se les echa encima si Belén vende los pisos. Pelayo y él se plantean si es lícito lo que quiere hacer Belén, que sigue creyendo que Daniel está vivo y quiere contratar a alguien para que se adentre en la selva y lo busque. Al final, está claro que cada uno debe velar por sus intereses y desde ese punto de vista, si Belén vende y les ocasiona un terrible perjuicio económico, irán a los tribunales.
Maite no asume el color de su verdadero padre. Y Pruden tiene que enfrentarse por fin a la verdad. Le cuenta cómo fue la relación con él. Maite aprovecha para echarle en cara su carácter posesivo y controlador: con ese ejemplo. Pero al saber la verdad, se acerca por fin a su madre.
Es el día en que Valeria tiene que ir ante el juez y refrendar la acusación de secuestro contra Diego. Augusto le pide que le acuse de secuestro. Por su parte Elena también pide a Diego que no contradiga esta versión o acusarán a Valeria de adulterio y tanto ella como él pagarán con cárcel. Valeria lo duda, pero finalmente no declara contra Diego. Él lo interpreta equivocadamente como que le sigue amando.
Marina, ilusionada, planea ir a ver a Román, que sigue cosechando éxitos en el Ceuta Atlético, cuando de repente ve a alguien que la descuadra por completo.
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