La relación entre Gabriel y Natalia avanza cada día, pero Gabriel nunca olvidará a su mujer. Dentro de unos días es el décimo aniversario de su muerte y Gabriel confiesa a su hija Mónica que echa mucho de menos a su madre. «Perdóname si alguna vez te he fallado, no ha sido fácil ser padre y madre a la vez», se disculpa con ella. Ella está muy agradecida por todo lo que ha hecho por ella y le anima a que sea feliz con Natalia.