Tras la gran decepción que han sufrido al descubrir que los de la Vega se han querido aprovechar de ellos, Manolita y Marcelino piensan vengarse de la familia de la Vega y fuerzan su despido en el Hotel con una actitud muy descarada y fuera de lo común en ellos.
Natalia sale del hotel con la maleta dispuesta a comenzar una nueva vida en París pero en el último momento se arrepiente y decide regresar para huir con Carlos.
Amelia está triste y Luisita cree que es por la comida familiar en la que le hicieron un interrogatorio sobre su terreno amoroso pero Amelia le confiesa que está triste porque "nunca nos podremos casar ni tener hijos ni tener una familia".