Tras una charla íntima y unas copas, Medina y Sonia terminan besándose. En Amar es para siempre.
Desde que Medina llegó a la agencia de parejas, no ha dejado de sorprender a su jefa con su habilidad para resolver los casos más imposibles.
Medina es un soñador, pero Sonia es todo lo contrario. Sonia vende amor fácilmente pero, personalmente, no cree en este sentimiento. La joven evita todo lo que tenga que ver con el compromiso y las relaciones, algo que ha creado mucha curiosidad en Medina.
Medina sorprende a Sonia en un momento de debilidad, descubriendo lo que realmente piensa su jefa sobre las parejas. Sonia, sin dase cuenta, expresa lo que a ella le gustaría vivir con su pareja.
Medina empieza a mirar a Sonia con otros ojos. Ambos disfrutaron de unas copas en King’s mientras seguían hablando sobre el amor y el sufrimiento.
La conversación se volvió cercana y complicada. El alcohol hace que Sonia deje atrás sus perjuicios y de paso a la pasión descontrolada.
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Fuente: antena3.com