Gabriel vuelve a intentar acercarse a Natalia para volver a ser la misma pareja de antes, pero Natalia tiene claro que no piensa volver a usar esa carta para cumplir su venganza.
Gabriel quiere ser el legado de su padre y sorprende a su madre con la maqueta que hace unos meses tenía como principal objetivo profesional, hacerse con la Plaza de los Frutos: "Voy a construir el mayor proyecto hotelero del centro de la ciudad y no voy a parar hasta conseguirlo".