Ana jamás se hubiese imaginado toparse con Carlos de la Vega, Ana culpa a los de la Vega de su tragedia familiar y tomará una importante decisión respecto a Manuel.
Salvador, el patriarca de la familia de La Vega soborna a Manuel, un antiguo trabajador, para no ir a juicio por un accidente laboral que le dejó en silla de ruedas.
Ana cree que pronto se hará justicia por la muerte de su hermano y la invalidez de su novio Manuel por un accidente laboral por falta de seguridad en una de las obras de la familia de La Vega.
La familia de la Vega tiene un gran plan: hacerse con el hotel de Benigna y poco a poco, adueñarse de la Plaza de los Frutos entera donde querrán convertir El Asturiano en un parking.