Durán visita a Ortega para entretenerle mientras que en el semanario, Carvajal y Charo están a punto de entrar en directo por la radio en una entrevista en la que confiesan el lado más oscuro de Ernesto.
Tras su premeditada y calculadora actuación salvando a los trabajadores del secuestro del semanario, Ortega copa las portadas de todos los periódicos como si se tratase de un héroe.
Luisita le presta dinero a Arturo para que invite a cenar a Llanos y pague la señal de un anillo, pero no puede evitar sentirse algo triste ante el inminente compromiso.